... Y después de más de un año sin vernos, por fín hemos podido coincidir.
Un montón de cosas de las que hablar y un tiempo que pasa rápidamente. Vino a cenar, pero al final se nos fué el día, ya que nos despedimos después de las doce de la noche. Vimos fotos, hablamos de los niños, de nuestras aventuras al otro lado del charco (cosa muy rara, no hablamos de nuestros trabajos).
Siempre es agradable quedar con los buenos amigos que han marcado nuestras vidas y llevamos en nuestro corazón.
Gracias por tu visita Natalia, espero devolvertela pronto. Feliz vuelta al hogar.
Un beso enoooorme
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